Proyecto Venus

El Proyecto Venus: una respuesta a la crisis económica

¿Qué ocurriría si la energía eléctrica en el mundo fuera gratuita? ¿Qué pasaría si además fuéramos capaces de generar dicha energía sin afectar el medio ambiente?
Imagínese que pudiéramos ir de New York a Beijing en tan sólo dos
horas y sin utilizar una sola gota de combustible derivado del petróleo. Para los creadores del Proyecto Venus, todo lo anterior podría ocurrir hoy mismo, si se cambiara nuestro sistema económico basado en el dinero, por una economía basada en recursos.

Las ideas fundamentales del Proyecto Venus están siendo conocidas por millones de personas a través de la película Zeitgeist: Addendum, que está siendo difundida de manera gratuita a través de Google Video. El
Proyecto Venus es una respuesta concebida varios años atrás, pero que cobra vigencia a raíz de la crisis económica que vive el mundo. Una alternativa casi fantástica, pero asombrosamente viable para mirar hacia el futuro.

El Proyecto Venus Surgió a mediados de los años setenta en Venus, Florida, en los Estados Unidos. Su creador es Jaque Fresco, un futurista y autodidacta multidisciplinario, que se define a sí mismo como
diseñador social sin educación oficial universitaria, quien durante el siglo XX realizó importantes aportes en diversas áreas de la ciencia tales como aeronáutica, medicina, arquitectura, sólo por citar algunas.
Tras padecer los efectos de la gran depresión económica de 1929, Fresco ha pasado el resto de su vida incursionando en diferentes campos de la ciencia para encontrar una solución factible y de largo trazo para los principales problemas que enfrenta el mundo. En la actualidad, el Proyecto Venus ha incorporado a desarrolladores e investigadores en diversas ramas del conocimiento humano que enriquecen las ideas originales de Fresco y aportan nuevas propuestas. El proyecto cuenta ya con una serie de publicaciones en texto y video, ha divulgado un manifiesto y tiene una propuesta que abarca varias etapas.

Hoy que nos enfrentamos a una crisis económica, cuyos alcances aún no
pueden ser del todo calculados, el Proyecto Venus ha iniciado un debate acerca de la forma en que el mundo está organizado, y discute la viabilidad de continuar en dicho orden. Cuestiona la economía basada en el dinero, considerando que la moneda es una invención enfocada al beneficio y plantea un ejemplo práctico: imagine que yo tengo una tienda y ofrezco un producto, pero mi competencia, el de la tienda de enfrente por ejemplo, ofrece un producto mejor. Si soy honesto con mi cliente y le digo que cruzando la acera encontrará una opción superior,
seguramente no duraré mucho en el negocio. Partiendo de esta idea, Jacque Fresco afirma: "Cuando mi médico
asegura que es indispensable realizarme una costosa operación para extirparme un riñón, no sé si realmente necesito someterme a dicho tratamiento o si él está buscando comprarse un yate nuevo.

Paralelamente, señalan que la economía monetaria basa su éxito en la escasez. Es decir, para que el precio de algún producto se mantenga elevado y en consecuencia dé un amplio margen de ganancias, es necesario que dicho producto se ofrezca en cantidades limitadas. Explican que esa es una de las causas principales por el que se encarecen los alimentos y las medicinas. Este mismo sistema, según el Proyecto Venus, es lo que supedita el uso de la tecnología a la ganancia, a pesar de que en el mundo existen recursos suficientes para abatir los principales problemas de la humanidad. Plantean que el uso de
la tecnología se ha prostituido a tal grado que nos espera un futuro en donde las máquinas tienden a reemplazar a los seres humanos. En nuestra economía monetaria, las personas que son despojadas de un empleo, pierden las
posibilidades de generar los recursos para subsistir. Refieren que un pilar fundamental en la economía actual son los combustibles fósiles, cuyo uso es obsoleto desde el punto de vista tecnológico y ecológico, pero en el terreno económico, es lo que delimita el orden mundial. La alternativaExisten en este momento formas para dotar de energía al mundo prescindiendo completamente del petróleo. El Proyecto Venus cita la energía eólica y afirma que hay estudios serios donde se asegura que este método podría generar suficiente energía para cubrir las necesidades actuales de los Estados Unidos. Y van más allá, señalando que una buena parte de la energía eléctrica que se consume en el Reino Unido se produce con turbinas que son movidas por las corrientes marinas. Estas dos formas de generar energía ya serían suficientes para dejar de construir presas y quemar hidrocarburos con el pretexto de generar la energía que requiere el mundo. Sin embargo, existe además otra fuente inagotable y limpia de energía: la geotérmica y según este proyecto, sólo falta voluntad para hacer que todo el planeta tenga energía ilimitada, limpia y gratuita. Para el Proyecto Venus, esto es sólo un ejemplo de cómo los recursos del planeta podrían ser aprovechados como una gran herencia para toda la humanidad, y no como el beneficio para unos cuantos. Los aviones actuales podrían ser sustituidos por modernos trenes electromagnéticos no contaminantes que ya han sido diseñados y son capaces de superar al tren bala hasta alcanzar velocidades de 6,500 kilómetros por hora. Eventualmente, una economía de recursos volvería prescindible el dinero y todos los fenómenos negativos que este genera, como la guerra, la corrupción y varios tipos de delito.

Proyecto Venus no es una solución perfecta, señala Jacque Fresco, pero es mucho mejor que lo que tenemos en la actualidad, concluye. Rechaza que se trate de una utopía, ya que se manejan soluciones completamente factibles, basadas en el largo historial del conocimiento humano.




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